En una visita relámpago a Los Angeles, Javier Milei se reunió con empresarios e inversores de sectores clave como finanzas, tecnología, energía y entretenimiento. En el lujoso hotel Beverly Hills, el Presidente ofreció lo que algunos asistentes describieron como un “pitch” financiero: una presentación técnica para “vender” a la Argentina como destino de inversión.
El evento, organizado en un entorno exclusivo y de alto perfil, fue el centro de la gira de 24 horas antes de regresar al país para enfrentar una prueba electoral clave en la provincia de Buenos Aires. Según fuentes cercanas al mandatario, Milei se mostró distendido y cómodo ante una audiencia que valoró su enfoque liberal y sus propuestas económicas.
Sin embargo, pese al entusiasmo expresado por algunos participantes, la reacción general del círculo empresarial fue de cautela. Aún persisten dudas sobre la estabilidad institucional, los riesgos asociados al proceso electoral y las denuncias de corrupción que salpican a su entorno más cercano.
Milei parte de Estados Unidos con el respaldo simbólico de un espacio que lo escucha con atención, pero sin garantías de inversión inmediata. En plena campaña y con tensiones políticas internas, el desafío será traducir esa valoración en confianza concreta.