El Día de la Madre no logró aliviar a los comercios. Tras largos meses de números negativos por la crisis económica y la pandemia, las ventas se desplomaron un 25,1% en relación a 2019, siendo este el tercer año consecutivo de baja.
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) estimó que "los faltantes de mercadería, los ingresos insuficientes en los hogares, el temor a que la situación económica empeore, los protocolos estrictos para ingresar a los locales físicos y en algunas localidades las restricciones que todavía existen para circular, afectaron fuerte la venta".
La caída de este año es la tercera consecutiva en esta tradicional fecha, ya que en 2019 hubo una merma del 12% respecto a 2018 y, ese año, el descenso fue de 13,3% en relación a 2017, último año en que los registros de la entidad observaron un leve crecimiento del 1,1%. "Ya la temporada pasada la fecha había sido muy pobre por la recesión económica. Y este año se profundizó esa dificultad con la crisis sanitaria", indicó la CAME.